miércoles, 24 de junio de 2009

Homenaje a Javier Villafañe - Feliz Cumpleaños N° 100



Javier Villafañe fue ante todo mi amigo. Hoy, 24 de junio cumpliría 100 años. Cada cumpleaños levanto una copa y brindo junto a una marioneta que mi madre me trajo de los pagos de sus padres, Praga. La marioneta de cerámica es el personaje de un viejito al que yo llamé naturalmente Javier.

A Javier lo conocí en los 80’ en un encuentro de narradores y le hice un reportaje para la radio en la que trabajaba, le conté que escribía, que coordinaba un taller literario que se llamaba Carrusel y que era cuentacuentos. En esa oportunidad lo ví vestirse de teatro y montar El Panadero y el Diablo sobre sí mismo. Me maravilló, pensar que estaba rondando los 80 años y provocaba una magia alucinante. Nos volvimos a ver tiempo más tarde cuando yo ya había adquirido todos sus libros a través de su amigo Pablo Medina. Por supuesto que Javier me recordaba como si nos hubiéramos visto el día anterior porque los poetas flotamos en una misma dimensión conocida. Esta vez, Carrusel había editado un libro propio y aprovechamos a dedicárselo, era una Feria del Libro en Buenos Aires. Javier estaba acompañado con su compañera Luz Marina y caminaba y hablaba muy despacio. Ese hombre con ojos de mares profundos, tenía aún espíritu andariego pero esta vez era un andar pausado parecido al de los sabios; con esta imagen me quedé por siempre.